Aqui estamos en un templo : el donde se venera su mayestad el jamón ibérico de bellota.
Me consiguió Miguel Quirós, mi primo que tiene restaurante gastronómico en Guejar-Sierra, encontrar con uno de los dueños, Manolo.
Cinco productores se unieron para crear esta empresa con exigencia de calidad máxima : en las dehesas del Valle de los Pedroches, zona tradicional de crianza de cerdos ibéricos y curación, seleccionan cerdos 100% ibéricos, sin mescla con raza mas rendimiento, con alimentación de bellotas durante la fase de engorde.
Ofrece garantia máxima de trazabilidad (cada cerdo 100% ibericon tiene sus certifcados de origen y crianza, con verificaciones muy serias de los ducumentos; como Manolo me lo enseñó; ver fóto) y higiene.
Los jamones tienen 36 meses de curación, secados al aire de la Sierra Morena próxima, siendo semi enterrada la sala para mentener temperatura natural incluso por el verano..